Tener Socios

Como te comentaba anteriormente, imagínate esa comida de primos, amigos, compadres, en donde empiezan a bosquejar una buena idea de negocio y al final de la fiesta pareciera que tienen un socio con el cuál pudieran empezar. Déjame preguntarte algo... ¿Así elegirías a tu personal? ¿En una mesa en una fiesta de tres años? Me refiero a lo siguiente, para contratar a tu personal, ¿Cuál sería el proceso que debería seguir?
Seguramente sería el siguiente:
Revisar diferentes CV
Revisas los que te llaman la atención y por ultimo
Hacer una entrevista
Pues prácticamente ese proceso, a mi parecer, es el que debería llevarse a cabo para poder seleccionar a un socio. No es que te pongas exigente... Bueno en realidad sí. Es ponerte exigente con la selección de las personas que van a trabajar a tu lado y no es por otra cosa que el poder evitarte largas peleas para decidir el rumbo de la empresa.
El no entender algunas condiciones fundamentales de la otra persona, antes de empezar un negocio, puede ser de vida o silencio para siempre, dile adiós a las reuniones en navidad. Evita perder amigos o familiares, es mejor poner las condiciones claras desde el principio.
Si al final se pierde la empresa porque no se pudieron poner de acuerdo está bien, habrán aprendido.
El problema es que si sucedió después de continuas y largas peleas. Peleas que dejaron en algunos momentos de ser de trabajo y se volvieron personales. El resultado generalmente son personas que quedan lastimadas y resentidas.
La idea que se tenía al principio de tener un socio de mil batallas y con el que se pudiera cambiar la situación económica de ambos se esfuma en medio de una tormenta de arena que nadie sabe dónde se perdieron porque el producto era bueno, pero las decisiones y la visión no eran correctas. Y al estar discutiendo en niveles diferentes de entendimiento y sobre todo de necesidades. Nos hace, muchas veces, decir cosas que realmente no sentimos. Realizar acciones que en otras situaciones no las haríamos. Y entonces los grandes amigos que empezaron el negocio dejan de frecuentarse, los primos de toda la vida se pierden y en año nuevo ya no aparecen.
“¿Quieres perder a alguien? Invítalo a un negocio.”
He escuchado esa frase frecuentemente. Pero si no invitas a tus amigos, o familiares, que son las personas en las que confías, entonces ¿a quién invitas para tu primer negocio?
Creo que el problema de perder a alguien en un negocio radica en que antes de asociarse no se toman el tiempo de conocerse realmente. De preguntarse los motivos, las necesidades, las aspiraciones, las responsabilidades y las obligaciones que tienen. Es por eso que hice un cuestionario que seguramente iré modificando con el paso del tiempo. Contéstalo, te dejo el cuestionario Aquí